¿Tienes preguntas sobre las muelas del juicio?

Las muelas del juicio, cordales o terceros molares se encuentran en la parte posterior de las arcadas dentales, tanto del maxilar superior como del inferior. Pero, ¿sabemos cuál es su propósito o si duelen al extraerlas? ¡Hoy te lo explicamos en nuestro blog!


¿Cuál es el propósito de las muelas del juicio?

Las muelas del juicio tenían una importante función cuando los humanos todavía no habían descubierto el fuego y, con ello, era su forma de hacer más blandos y digeribles los alimentos, cuando en aquella época, nuestros antecesores necesitaban dientes fuertes para masticar y moler semillas y raíces.

Los terceros molares eran además mucho más grandes. En realidad, más grandes que todas nuestras piezas dentales y con el tiempo, se han ido adaptando al tamaño cada vez menor de nuestra mandíbula. ¡Así y todo, muchas veces no nos caben tantos dientes en la boca!

Las muelas del juicio eran antes mayores cuando los hombres necesitaban masticar raíces y semillas.

¿Por qué se llaman muelas del juicio?

Las muelas del juicio salen alrededor de los 18 años y se considera que en ese momento es cuando empezamos a tener “buen juicio” y a razonar con sensatez.

Y en la mayoría de los idiomas tienen un nombre común similar: muelas del juicio, de la sabiduría, de la sensatez, del amor.

¿Duelen las muelas del juicio al salir?

Hay veces que apenas causan algo de molestia al romper la encía y erupcionar, igual que lo hacen los dientes de leche de los niños al salir.

Pero en el caso de los terceros molares es mucho más frecuente que haya dolor e inflamación y en este caso es necesario consultar a nuestro dentista de confianza para que compruebe si están bien colocadas o pueden comprometer a otras piezas dentales.

Al extraer tus muelas del juicio, puedes tomar ibuproceno para el dolor.

¿Es necesario extraer siempre los cordales?

La respuesta es no. Si las muelas tienen suficiente sitio para salir y no están afectadas por caries se pueden conservar perfectamente. El problema está cuando los cordales salen en una dirección en la que afectan a otra muela. En ese caso si debe extraerse.

Hay otros problemas como la pericoronaritis que consiste en que la muela no consigue romper del todo la encía y se queda parcialmente cubierta por ésta.

Esto hace que se acumulen las bacterias entre la muela y la encía provocando caries y periodontitis. En este caso, siempre que la muela tenga sitio, tendremos que “ayudarla” recortando la encía sobrante.

Mediante radiografías, el odontólogo puede saber cómo está colocado el molar y la dirección en la que va a desplazarse. Si las radiografías las hacemos antes de los 18 años podremos adelantarnos a posibles problemas. Por eso son importantes las revisiones anuales.

Si tienes dolor o inflamación de tus muelas del juicio, cordales o terceros molares, pide cita con tu dentista de confianza.

¿Duele extraer las muelas del juicio?

La extracción de los cordales se realiza bajo anestesia y por tanto es indolora. Pero tras desaparecer el efecto de la anestesia sí que podemos sentir dolor aunque controlable con la administración de analgésicos y teniendo una serie de cuidado hasta que cicatrice la zona.

Lo más importante es acudir al odontólogo si sentimos alguna molestia o hinchazón en la parte posterior de nuestras encías o una presión en los dientes posteriores.

En la consulta podremos comprobar si todo va bien o si es necesaria una extracción. No dudes en acudir a la Clínica Dental los Valles en Guadalajara, si tienes cualquier duda con tus cordales en tu primera cita es gratuita.

Imágenes: Wikihow

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